Una Fuerza Natural
La biodiversidad de Colombia posee uno de los niveles más altos a nivel mundial, el territorio nacional alberga 59 áreas protegidas y contiene 311 ecosistemas costeros y continentales.
A través de diferentes misiones aéreas y actividades en tierra, los hombres y mujeres de la Fuerza Aérea Colombiana realizan una lucha constante contra los delitos ambientales con el fin de proteger el tesoro natural del país. Muestra de ello es el objetivo N° 12 que la Institución plantea: “Preservar el medio ambiente: uso racional, conservación y protección de los recursos naturales, así mismo el manejo integral de los residuos generados al interior de las Unidades, enmarcado en la normatividad ambiental vigente. En general crear una cultura de respeto y conservación del medio ambiente”.
Específicamente, en el Plan Estratégico Institucional 2011 a 2030, se incluyen elementos de Responsabilidad Social en los que la Fuerza Aérea Colombiana tiene un pacto con el control y la protección del medio ambiente en la que además de cumplir con estatutos legales, ha incentivado el valor ambiental mediante el desarrollo de zonas de reserva en sus Unidades, la denuncia ante los entes competentes de actividades ilícitas como minería ilegal, control de tráfico de fauna y flora, reforestación y procesos más limpios en mantenimientos y manejo de residuos, además apoyo permanente a las autoridades ambientales regionales.
La Fuerza ha dado contundentes golpes a las finanzas de Grupos Armados Organizados dedicados a la minería ilegal, realizando un trabajo conjunto con las demás Fuerzas Militares y la Policía Nacional, logrando la ubicación y destrucción de dragas, usadas para la explotación ilícita de yacimientos mineros en diferentes ríos del país. Pero este delito ambiental, no es el único al que hace frente la Institución, las misiones de patrullaje y vigilancia aérea que realiza en contra de la deforestación de los bosques del territorio nacional, han sido fundamentales para que diferentes instituciones nacionales e internacionales puedan encaminar líneas de acción para combatir este flagelo.
Así lo confirmó la Asesora de la Dirección General de Coormacarena, Lina Díaz, quien manifestó “La FAC es un aliado estratégico en el ejercicio de nuestra misionalidad, en conjunto hemos desarrollado diferentes estrategias para proteger nuestros recursos naturales. En nuestra lucha contra la deforestación la Fuerza Aérea juega un papel muy importante, ya que con su sistema de identificación geográfica podemos identificar este flagelo, que es la puerta a otros delitos como el acaparamiento de tierras para la ganadería extensiva”.
Los pilotos militares de la Fuerza Aérea Colombiana se enfrentan diariamente al reto de sobrevolar 3 coordilleras, múltiples climas y espacios geográficos de gran diversidad; con el fin de garantizar el futuro ecológico que requieren las próximas generaciones; para conseguirlo la Institución realiza misiones de extinción de incendios en bosques, traslado de fauna hacia sus lugares de origen luego de recibir un proceso de rehabilitación a causa del tráfico ilegal de especies, vigilancia de parques naturales, reforestación para la recuperación de la vegetación de cerros emblemáticos, restauración de vertientes con la siembra de alevinos y semillas nativas en las franjas forestales protectoras de ríos tutelares, vigilancia de los volcanes y nevados más activos del país con el fin de prevenir consecuencias fatales que ocasionan los desastres naturales, para esta misión los pilotos se enfrentan a operaciones a grandes altitudes.
Así mismo, en 2019 el Departamento Nacional de Planeación (DNP) entregó el estudio de estructuración del proyecto, bajo el esquema de APP, para la generación de energía a partir de fuentes renovables en las 12 Unidades Militares Aéreas (UMA) del país. Este proyecto beneficia a la nación con la reducción de emisiones de CO2 gracias a la sustitución del Diésel por generación con fuentes no convencionales de energía, así como ahorro para el presupuesto cercano al 12% en el costo de la energía para la FAC.
Es así como la Fuerza Aérea Colombiana ha establecido como su Política Ambiental, el compromiso de preservar los recursos naturales del territorio colombiano.
