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Los retos en el Caribe para el personal médico de la Fuerza Aérea

La pandemia ha traído consigo nuevos retos en las diferentes especialidades de la Institución, al igual que para el personal médico que sigue enfrentando a diario esta situación.

La pandemia después de un año ha transformado todos los procesos y por esto todas las áreas de su Fuerza Aérea Colombiana han tenido que adaptarse a las restricciones y condiciones que llegan con cada uno de los picos a los cuales se enfrentan los profesionales de la salud, en todo el país. Por esto que la Subteniente Contreras médico del Establecimiento de Sanidad Militar del Comando Aéreo de Combate No. 3, habló sobre la forma en la que se han desarrollado las labores de atención y cuáles son los nuevos retos que como Oficial, mamá y médico llegan con las difíciles situaciones que se presentan en el Caribe colombiano.

La Oficial que hace parte del equipo médico de la Unidad e ingresó a la Fuerza Aérea Colombiana en el año 2017 área de la medicina aeroespacial es un campo muy específico para ella, lo cual despertó su interés académico, siendo la Institución una oportunidad para ahondar en este campo y poder hacer parte de los profesionales de la salud que realizan evacuaciones aeromédicas, llegando a esas zonas en las que sólo un ‘ángel de acero’ como ella los llama, puede llegar para llevar esperanza a la vida de los colombianos que residen en estas áreas rurales.

Por esto en una entrevista habló sobre el nuevo significado que ha tomado su labor desde que el COVID-19 llegó a la vida diaria de sus pacientes el Caribe colombiano, quienes no solo corresponden a los actuales miembros de la Fuerza Aérea, sino también a personas retiradas, familiares y pensionados que están en todos los rangos de edad y residen en diferentes ciudades de la región.

¿Cuál es la mayor dificultad que afronta como médico durante la Pandemia?
Pienso que lo más difícil es que cuando llegan al Establecimiento de Sanidad no sabemos si están contagiados, ya que esto conlleva un proceso y establecer si nuestros pacientes son positivos o no, requeriría que hiciéramos pruebas a todas las personas que llegan, pero en muchas ocasiones vienen por enfermedades comunes u otro tipo de síntomas diferentes a los del virus, por ende establecer ese nivel de peligrosidad no es fácil y nos obliga mantener al máximo las medidas preventivas para darle atención a cualquier paciente, dándole la debida atención a las diferentes condiciones de salud por las que llegan.

¿Cuál cree que será la mayor dificultas que afronten las personas después de la pandemia, hablando únicamente del área de la salud?
La salud mental creo que será nuestro mayor reto cuando esto termine, ya que mientras logramos la ‘inmunidad de rebaño’ de la que tanto se ha hablado, continuaremos afrontando picos de contagio como el que estamos atravesando en este momento y eso implica que la gente se resguarde en casa, que las personas que tienen trabajo incrementen su carga con las labores domésticas, que las quienes pierdan sus empleo sufran de ansiedad al ver la crisis laboral que atraviesa el país y todos los factores que como sociedad nos rodean, creo que será un desafío sobreponernos a eso, porque los espacios de esparcimiento, socialización y recreación se han visto muy disminuidos, generando más violencia, especialmente al interior de los hogares.

¿Cuál es y seguirá siendo su mayor preocupación, mientras se alcanza la ‘inmunidad de rebaño’?
Creo que a pesar de que ya recibí la vacuna por ser de la primera línea de atención, mi miedo continuará siendo no portar el virus a las personas que amo en mi hogar, ya que actualmente tengo una bebé de 10 meses que siempre me lleva a pensar que podría recibir el virus, ya que la vacuna no evita que uno sea portador o emisor, entonces a diario me doy cuenta de que el comportamiento de esta enfermedad es muy incierto y que soy la única que esta vacunada, pero mis padres que me ayudan con mi hija o mi esposo siguen estando muy expuestos y sin importar que tengan o no la vacuna, las precauciones se deben mantener al máximo.

Como médico también pensaría que mi mayor preocupación es que las personas en general sigan bajando la guardia cada vez que bajan los índices de contagio, porque el virus sigue mutando con nuevas sepas, lo cual sigue representando un alto riesgo para todos, entonces creo que eta preocupación no debería ser solo mía sino de todos los colombianos, por generar una conciencia responsable sobre las consecuencias que acarrea para la salud pública.

Finalmente, ¿Cuál cree usted que es el compromiso más grande que tiene los integrantes de la Fuerza Aérea en este momento?
Creo que el compromiso sigue siendo volar, entrenar y combatir para vencer, porque es nuestro deber con todo el país, cumplir con las normas de bioseguridad sanitaria para poder responderle a los colombianos con la labor que nos han encomendado, ya que de esta también depende su seguridad, los apoyos que se están dando en cuestiones humanitarias, la preservación de nuestro medio ambiente, que le aportan significativamente al desarrollo social y económico de todas las regiones.

La Subteniente Contreras y todo el equipo médico del Establecimiento de Sanidad Militar siguen haciendo frente a esta difícil situación que atraviesa el país a causa de la pandemia y cada uno de ellos desde su labor siguen trabajando con compromiso, valor e integridad para que los pacientes sean atendidos oportunamente, sumándose a miles de personas que hacen parte del sector de la salud y no desfallecen ante el virus que les ha cambiado la vida a todos.

Autor
Comunicaciones Estratégicas CACOM 3

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